Publicado:
17 de marzo de 2023 18:51 GMT
El presidente serbio ha ordenado que se programe una reunión del Consejo de Seguridad Nacional para este sábado.
La orden de arresto contra el presidente ruso podría ser un paso hacia el mayor conflicto en la historia mundial, dijo el viernes el presidente serbio, Aleksandar Vucic.
“Me temo que nos dirigimos en la dirección de quizás el mayor conflicto en la historia del mundo. Me pregunto si alguien tiene el cerebro para poner fin a esta locura. ¿Alguien entiende el consecuencias que enfrentamos?”, comentó el mandatario sobre la noticia durante su viaje a la ciudad de Sid.
El líder serbio pidió a su jefe de gabinete que ordene al viceprimer ministro y ministro de Relaciones Exteriores, Ivica Dacic, programar una reunión del Consejo de Seguridad Nacional para este sábado.
Sin embargo, el presidente no estará presente en la sesión porque viajará a Ohrid (Macedonia del Norte) donde se reunirá con el primer ministro de Kosovo, Albin Kurti, y mediadores internacionales en el marco del diálogo sobre la normalización de las relaciones con la autoproclamada república. .
A pesar de la fuerte presión de la Unión Europea, Belgrado mantiene sus antiguos lazos con Moscú y se niega a sumarse a las sanciones impuesta a Rusia por la operación militar en Ucrania.
La Corte Penal Internacional emitió una orden de arresto contra Putin el viernes, citando su responsabilidad por presuntos delitos cometidos en Ucrania. El tribunal con sede en La Haya menciona la supuesta deportación de menores ucranianos en territorio ruso, lo que califica como un crimen de guerra y señala que hay motivos suficientes para creer en la responsabilidad directa del presidente ruso.
Al respecto, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, recordó que las decisiones de la CPI “no tienen sin importancia” para el país, “ni siquiera en términos legales”. La portavoz precisó que “Rusia no forma parte del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional y no tiene ninguna obligación en virtud de ella”, ni coopera con este órgano.
“Consideramos que la propia formulación del caso es escandalosa e inaceptable. Rusia, como varios países, no reconoce la jurisdicción de este tribunal, y para Moscú cualquier decisión de este tipo desde el punto de vista jurídico es insignificante”, reaccionó por su parte. parte Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin.
La CPI se estableció en 2002 para investigar infracciones graves de los Convenios de Ginebra y llevar ante la justicia a los responsables de crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y genocidio.
El documento fundacional, el Estatuto de Roma de 1998, ha sido ratificado por 123 países, lo que no incluyen los Estados Unidos, Rusia, China, Israelentre otros.