Publicado:
2 de marzo de 2023 07:58 GMT
El acuerdo incluye 200 misiles antiaéreos aire-aire avanzados de medio alcance AMRAAM y 100 misiles AGM-88B HARM que pueden derribar estaciones de radar terrestres.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos aprobó una posible venta de municiones para aviones de combate F-16 a Taiwán y equipos relacionados en virtud de un acuerdo valorado en 619 millones de dólares, dijo el miércoles la Agencia para la Cooperación en Seguridad del Pentágono.
“La venta propuesta ayudará a mejorar la seguridad del destinatario y mantener la estabilidad políticaél equilibrio militar y el progreso económico de la región”, comentó la agencia, destacando que este paso es “consistente con la ley y la política” del país norteamericano.

El acuerdo incluye 200 misiles antiaéreos avanzados AMRAAM aire-aire de medio alcance y 100 misiles AGM-88B HARM que puede derribar estaciones de radar terrestres. Según un comunicado de la agencia, los contratistas principales serán Raytheon Missiles and Defense, Tucson, AZ; y Lockheed Martin Corporation, Bethesda, MD.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa de Taiwán dijo que los misiles ayudarían a “defender efectivamente el espacio aéreo para hacer frente a las amenazas y provocaciones de las fuerzas armadas comunistas” y reforzaría las reservas de defensa, recoge Reuters.
La isla informó que el jueves por la mañana se detectaron 29 aviones chinos y 4 barcos alrededor de Taiwán. Según el informe, 21 de los aviones habían ingresado a la zona de identificación de defensa aérea en el suroeste de Taiwán.
Por su parte, Pekín subrayó que sus actividades en la zona están justificadas, pues busca defender su integridad territorial y ha exigido en reiteradas ocasiones a Washington que deje de suministrar armas a la isla.
- Taiwán se gobierna a si mismo con su propia administración desde 1949. Desde entonces, ha conservado la bandera y algunos otros atributos de la antigua República de China que existía en el continente antes de que los comunistas llegaran al poder. Beijing considera a Taiwán como parte inalienable de su territorio y la mayoría de los países, incluida Rusia, reconocen a la isla como parte integral de la República Popular China.