Campana y se acabó. Última etapa y proceso. No es solo que la especial sea corta, sino que se desarrolla en la playa o junto a ella, recuperando este final junto al mar que nos recuerda al Pink Lake de Dakar.
Nadie espera cambios en la clasificación, aunque en motos las cosas están tan apretadas que la victoria podría cambiar de manos. Es menos probable que lo haga en T4. En las demás categorías, los líderes tienen suficiente ventaja para conducir con una sola mano.
La especial debe ser bastante rápida, sin problemas de navegación y con el aliciente de que el podio final espera a los supervivientes al final.
Serán 136 kilómetros contrarreloj y otros 281 kilómetros de enlace, por lo que estamos ante los últimos 417 kilómetros de la 45ª edición del Rally Dakar.
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