Con sus cascos protectores puestos, por lo que pueda ocurrir en cualquier momento, los abogados turcos recogen pruebas en las zonas destruidas tras el devastador terremoto de magnitud 7,8 que ya se ha cobrado la vida de más de 46.000 personas.
Los miembros de los colegios de las 81 provincias turcas recogen todos los datos posibles que dejan los escombros, antes de que sean retirados definitivamente. Comprueban los materiales, el espesor del acero y otros detalles ciertamente relevantes. Algunas pruebas, sin embargo, ya han desaparecido.
“Somos abogados que trabajamos como voluntarios para dar prioridad a la fotografía de los edificios, así como a la identificación de las pruebas”, explica. Ahmet Kandemirdel Colegio de Abogados de Hatay. “Venimos aquí y tomamos fotografías de los edificios, de los materiales utilizados en el edificio, y las transferimos al programa para su archivo en la sede del Colegio de Abogados. En fases posteriores, todos ellos se utilizarán como base de prueba en los procesos judiciales”.
La policía turca arrestó a 269 sospechosos como parte de una creciente investigación sobre contratistas cuyos edificios supuestamente eran a prueba de terremotos. El propio Kandemir explica que el colegio de abogados había recibido decenas de llamadas de familiares de víctimas a quienes les habían dicho que su edificio era a prueba de terremotos.
¿Verdadera justicia?
The Ronesans Residence, un complejo de lujo que contó entre sus famosos residentes con el exfutbolista internacional ghanés cristian atsuse convirtió en un símbolo de las malas prácticas de construcción cuando se derrumbó como un castillo de naipes.
El principal contratista involucrado fue detenido en el aeropuerto de Estambul cuando intentaba salir del país el mes pasado. Su arresto fue noticia en Turquía, donde casi todos los medios de comunicación están bajo el control directo o indirecto del Gobiernolo que a su vez desató especulaciones sobre la búsqueda de chivos expiatorios.
Y es que algunas voces críticas se muestran preocupadas por las estrechas relaciones que mantiene el presidente Recep Tayyip Erdogan guardias con el sector de la construcción, y la influencia que ello podría tener en la disposición de su Gobierno a perseguir las negligencias.